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Una vez que hubo encontrado su camino, Tinajero el navegante llamó a sus falsos camaleones, los metió en una jaulita de hierro forjado, levó ancla, izó las velas y se hizo a la mar. 'En otros lares', pensaba para sí, 'estos falsos camaleones vivirán mejor'.
1 comentario:
Sí caray.
Mi comentario es: con esto me acuerdo específicamente de 1996, yo en Indiana, en un camión amarillo de escuela rumbo a no sé dónde --al boliche o a un baile en una escuela-- con un montón de pubertos, como yo.
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